Después de dos intentos abortados, el Ariane 6 ha lanzado un satélite de reconocimiento para las Fuerzas Armadas francesas el 6 de marzo a la 17,24 hora de Madrid, en el segundo vuelo y el primero comercial del cohete europeo.
El propulsor despegó del puerto espacial europeo de Kourou, en la Guayana Francesa, con la misión VA263. El cohete se elevó rápidamente hasta perderse de vista y se adentró en el cielo nublado. El despliegue de la carga útil se produjo poco más de una hora después del despegue, tras un segundo encendido de la etapa superior.
La carga útil es el CSO-3, el tercero y último de una serie de satélites de reconocimiento conocidos como Composante Spatiale Optique para el ejército francés. El CSO-3, al igual que sus dos predecesores, proporcionará imágenes de alta resolución a Francia y sus aliados europeos.
El primer vuelo comercial se ha producido después de un debut mayormente exitoso en julio de 2024. El cohete alcanzó la órbita y desplegó sus cargas útiles satelitales, pero no logró realizar una quema final de desorbitación, dejando varados en órbita la etapa superior y dos vehículos de reentrada aún unidos a él.
Inicialmente, Arianespace, la empresa lanzadora, había planeado realizar el segundo lanzamientoantes de fin de año, después de diagnosticar el problema que impedía que la etapa superior saliera de órbita. Sin embargo, en noviembre, la compañía retrasó el lanzamiento hasta febrero , citando únicamente el trabajo en curso para abordar "una pequeña cantidad de desviaciones" observadas en los datos del vuelo.
Arianespace fijó el lanzamiento para el 26 de febrero, pero lo pospuso para solucionar problemas no especificados con los sistemas terrestres necesarios para el lanzamiento. Un nuevo intento previsto para el 3 de marzo se canceló menos de una hora antes del despegue, nuevamente debido a problemas con la infraestructura terrestre.
El lanzamiento del CSO-3 es el primero de los cinco que Arianespace está planeando para el Ariane 6 en 2025, dijo David Cavaillolès, el nuevo director ejecutivo de Arianespace, el 28 de enero. El directivo añadió que la compañía trabajaría para lograr su objetivo de 9 a 10 lanzamientos de Ariane 6 al año "lo antes posible".
Sin embargo, el calendario de 2025 se ha pospuesto hasta la segunda mitad del año. El próximo lanzamiento de Ariane 6 podría no tener lugar hasta el verano. Arianespace anunció en la Conferencia Espacial Europea un acuerdo con Eumetsat, el operador europeo de satélites meteorológicos, para adelantar el lanzamiento del satélite de órbita polar Metop-SG-A1 al segundo lanzamiento comercial de Ariane 6, la misión VA264, que tendría lugar en agosto.
Las empresas españolas que participan en el programa del Ariane 6 son las siguientes:
Airbus Defence and Space en España ha diseñado y fabricado hasta siete elementos para cada lanzador Ariane 6. La IFS, Interstage Structure, dos estructuras de fibra de carbono intermedias entre la primera etapa de propulsión del cohete y la segunda; el LVA o adaptador de vehículo de lanzamiento, que crea la interfaz entre el lanzador y el satélite; el adaptador de carga útil, la estructura que sujeta el satélite al lanzador durante el despegue; así como la parte superior de los propulsores de combustible sólido, que se integran en los laterales del lanzador para proporcionar un mayor empuje durante los primeros segundos del despegue. Además, Airbus en Getafe también se ha encargado de fabricar y probar el 90% del cableado de todo el lanzador.
Airbus Crisa ha entregado dos tipos de equipos diferentes: la Unidad Multifuncional Centralizada (CMFU) y la Unidad de Activación Pirotécnica (PFU). La CMFU, una unidad modular y compacta, contiene el cerebro del lanzador, el computador de abordo. Se encarga también de la gestión de la energía y las comunicaciones, así como del control de las electroválvulas de los motores del lanzador.
Por otro lado, la PFU se ocupa de la detonación de dispositivos pirotécnicos para, entre otras aplicaciones, el encendido de motores o la separación de etapas del lanzador. La PFU es capaz de disparar iniciadores que se activan tanto eléctricamente como ópticamente mediante láser. Cada Ariane 6 embarca 4 unidades CMFU y 4 unidades PFU.
GTD desempeña un papel clave en el desarrollo y operación de sistemas críticos para el Ariane 6. Su contribución incluye el suministro de la familia de bancos de control, un sistema fundamental para la preparación y gestión del lanzador, así como el desarrollo del software a bordo del lanzador. Además, ha participado en el diseño y evolución de los simuladores operacionales de comportamiento dinámico, que permite la validación de sistemas en condiciones representativas del vuelo real. Por otro lado, ha desarrollado el streaming del sistema de video a bordo del lanzador, que permite ver el desarrollo de las operaciones en tiempo real cuando Ariane 6 está en vuelo.
Asimismo, la empresa es parte fundamental en las operaciones de lanzamiento en la Guayana Francesa, colaborando en la gestión y supervisión de los sistemas críticos que garantizan la seguridad y el éxito de cada misión. Su participación abarca los sistemas de control de fluidos, así como de la seguridad y de las infraestructuras para las operaciones en suelo. Por otro lado, se encarga del seguimiento por radar de la trayectoria del lanzador, proporcionando datos esenciales para la evaluación en tiempo real de la misión y la seguridad en vuelo. Además, GTD contribuye a la validación de las trayectorias de vuelo y la implementación de sistemas de seguridad operacional. Esta labor se complementa con la participación en el desarrollo de simuladores de entrenamiento operacional de seguridad en vuelo, facilitando la preparación de los equipos encargados de gestionar situaciones críticas durante la misión.
Por su parte, HV Sistemas ha suministrado diversos equipos de soporte de tierra, tanto para el FSF (Factory Simulation Facility) y las plantas de fabricación en Les Mureaux y Bremen, así como para la plataforma de lanzamiento en Kourou. Estos equipos son simuladores de potencia y equipos de adquisición y generación de señales analógicas y digitales, destinados a la simulación funcional de subsistemas del lanzador. Es de destacar que se han suministrado detectores de la señal láser de potencia utilizada para el disparo de los dispositivos opto-pirotécnicos del lanzador, así como de las barreras ópticas, permitiendo la simulación de dichos elementos.
Inventia ha participado en diversos equipos mecánicos de apoyo terrestre (MGSE, por sus siglas en inglés: Mechanical Ground Support Equipment) para el propusor bajo contratos de la ESA. También, para Airbus Defence and Space ha participado en las máquinas especiales que fabrican los componentes del lanzador, IFS Upper y Lower (Interface Structure) y cono del ESR (Equipped Solid Rocket) en la Línea Pulso Automatizada que Airbus dispone en Getafe.
Thales Alenia Space en España ha estado a cargo del desarrollo y fabricación de los transmisores de telemetría de Ariane 6, las unidades responsables de transmitir a las estaciones terrestres los datos generados por el lanzador durante toda la misión de lanzamiento. La compañía también ha sido responsable junto a Telespazio de la de la ampliación del sistema de comunicaciones por fibra óptica (STFO) en el Centro Espacial de Guayana para incluir el nuevo complejo de lanzamiento de Ariane 6 (ELA4) y mejorar sus capacidades. El sistema STFO actúa como interfaz entre los bancos de pruebas y los satélites durante las diferentes fases de preparación para el lanzamiento.
Además, Thales Alenia Space ha suministrado el instrumento óptico de muy alta resolución del satélite CSO-3, verdadero corazón de la misión, y ha desarrollado equipos fundamentales como los paneles solares, el sistema de telemetría de imágenes de muy alta velocidad, el módulo de encriptado y desencriptado de datos para los enlaces ascendentes y descendentes y los transpondedores de telemetría, telecomando y seguimiento.
Sener, por su parte, ha sido la empresa encargada de suministrar una antena de telemetría. Esta antena permite monitorizar y transmitir datos desde el Ariane 6 hacia las estaciones terrestres durante el vuelo. Esto incluye información crítica sobre el estado de los sistemas, sensores y subsistemas del lanzador. De este modo, se habilita el control y la comunicación entre el cohete y los equipos en tierra y es posible realizar el seguimiento y la localización del Ariane 6 durante sus distintas fases de vuelo, así como, eventualmente, resolver posibles problemas por parte de los equipos técnicos en tierra, ayudando a garantizar el éxito de la misión espacial.
El Ariane 6 es el sucesor del Ariane 5 cuya última unidad voló en 2023 y al que tendría que haber empezado a tomar el relevo en 2020 pero que, por una crisis sin precedentes en el sector espacial del Viejo Continente , no lo pudo hacer hasta el 9 de julio de 2024.
Como era una operación de ensayo con los riesgos que eso entraña, entonces lo hizo sin llevar una carga comercial, sólo una decena de microsatélites encargados por universidades y que se saldó con una pequeña incidencia ya que el último segmento del cohete se desvió ligeramente de su trayectoria. La consecuencia fue que el tercer encendido del motor no se realizó según los planes iniciales y no se desprendieron dos cápsulas de vuelta a la atmósfera que debían ser objeto de test.