Luego de confirmar que el Ariane 6 será lanzado en 2024, el grupo de trabajo (conformado por la ESA, CNES, ArianeGroup y Arianespace) sigue realizando pruebas del sistema de lanzamiento. A las de julio, se suman las de comienzos de septiembre: el viernes 1 hubo un ensayo de disparo en caliente, representativa del vuelo inaugural, de la etapa superior en la sede de la agencia aeroespacial alemana DLR en Lampoldshausen.
El martes 5 corresponden las pruebas combinadas, similar a lo ocurrido en julio: encendido en caliente del escenario principal con funcionamiento estabilizado del motor Vulcain 2.1, en el puerto espacial de Kourou en Guayana Francesa. Esto puede suponer un hito, ya que su éxito permitirá calificar todas las operaciones de una cuenta atrás para el lanzamiento de la misión. Forma parte de la calificación global del sistema, comprende el lanzador y sus instalaciones terrestres; en particular el complejo de lanzamiento ELA4 dedicado al Ariane 6 y su zona de lanzamiento ZL4.
En un mes más, el martes 3 de octubre, se realizará, también en Kourou, otra prueba de encendido en caliente del escenario principal con funcionamiento estabilizado del motor. Sin embargo, en este caso se trata de un ensayo de larga duración: aproximadamente ocho minutos (470 segundos). Cubrirá toda la fase de vuelo y contribuirá a la calificación de "listo para volar" del escenario principal.
Aunque no se ha detallado una fecha concreta, en otoño de 2023 se hará, en Lampoldshausen, la prueba de combustión en caliente de la etapa superior. Se prevé que se realice más de un testeo para exminar el comportamiento de la etapa en casos degradados, con el objetivo de "ofrecer un Ariane 6 más robusto".
Pruebas de la etapa superior del Ariane 6. Créditos: ESA/DLR/ArianeGroup
Innovaciones del Ariane 6
Montada en las instalaciones de ArianeGroup en Bremen, Alemania, la etapa superior del Ariane 6 incorpora algunas de las principales innovaciones del lanzador. Esto le permite llevar a cabo la gama más amplia posible de misiones de lanzamiento, incluidas las complejas como el despliegue a gran escala de constelaciones de satélites en la órbita terrestre baja (LEO en inglés), o la inyección sucesiva de cargas útiles en diferentes planos orbitales. Al final de su misión, la etapa es sacada de órbita.
El escenario incluye dos tanques principales para propulsores criogénicos (hidrógeno líquido y oxígeno) para alimentar el motor Vinci que puede volver a encenderse hasta cuatro veces, y la innovadora Unidad de Energía Auxiliar (APU).
La secuencia de prueba de la etapa superior fue representativa de su fase operativa completa durante el vuelo inaugural del Ariane 6. Se necesitaron más de 11 minutos (680 segundos) de funcionamiento del motor reencendedor Vinci en dos impulsos en paralelo con el funcionamiento de la APU, que estuvo en funcionamiento durante un período acumulado de casi 30 minutos.
La APU hace posible que Vinci se reinicie en el espacio manteniendo la presión adecuada en los tanques de combustible y evitando burbujas en las líneas de combustible. Utiliza pequeñas cantidades de hidrógeno líquido y oxígeno de los tanques principales, reemplazando un sistema que dependía de grandes cantidades de helio en tanques.