El director de obras del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA), Santiago Rodríguez, habla con Infoespacial en el Sssif de Málaga sobre los peligros de una guerra de navegación, si de repente los sistemas GPS dejasen de funcionar, algo que sería "totalmente caótico" tanto para Defensa como para la vida civil; sobre la futura constelación satelital del INTA, proyectada para 2026, para desarrollar "un programa de constelaciones de Defensa"; y sobre las "impagables" imágenes que ha dejado el satélite Paz al servicio de la inteligencia militar durante estos cinco años.
¿Cómo valoran desde INTA lo que ha aportado el satélite Paz durante estos cinco años?
No siendo un miembro del equipo de Paz, bajo mi punto de vista, ha supuesto realmente dotar al Ministerio de Defensa y a España la capacidad de manejar un sistema SAR. Eso está al alcance de muy pocos. Ha sido un éxito rotundo desde el punto de vista de la operación, que la operación la ha hecho completamente el INTA. Nos ha permitido aprender muchísimo sobre SAR, hasta el punto de estar en condiciones de definir y de proponer un sistema SAR 100% español. Y desde el punto de vista de la Defensa, obviamente, las imágenes SAR son impagables. Todos son ventajas y creo que ha sido un éxito total.
¿Cuál es el papel del INTA?
El INTA opera el satélite y recibe las imágenes, pero es Hisdesat quien es el que controla toda la producción, las proporciona al Ministerio de Defensa y se ocupa de comercializar las imágenes que no son de Defensa. El INTA es un simple operador.
¿Cómo ha ayudado el satélite a mejorar la capacidad de Defensa y de Seguridad de España?
Es una gran herramienta en manos de cualquier Ministerio de Defensa o en manos de cualquier país. Es básico disponer de esa tecnología. Es verdad que si el satélite se supone que en poco tiempo tendría que dejar de ser operativo, aunque se prevé que esté bastantos años más. Lo importante es que España además ha adquirido la capacidad de desarrollar, especificar y manejar un sistema SAR.
¿Cuáles son los problemas de la dualidad y compaginar las aplicaciones comerciales con las de Defensa?
Bueno, es siempre un problema. Es un problema sobre todo para las aplicaciones civiles. Los sistemas duales tienen sus complicaciones. La seguridad en Defensa es fundamental. Los cauces, los métodos de encriptación, la forma de acceder a las imágenes o a los datos están totalmente controlados y fiscalizados por Defensa y por una serie de protocolos que no son siempre fáciles de seguir por parte de un operador comercial. Evidentemente pueden convivir, pero hay que pensar que defensa siempre tiene prioridad sobre ese tipo de imágenes.
¿Hay riesgo de entrar en una guerra de navegación?
Sí. Nuestros satélites operan en base a la información que obtenemos de los GPS. No quiero imaginar lo que sucedería si de repente la consideración GPS o Galileo se parase o hubiese un problema. O si simplemente por cuestión de seguridad se redujesen los servicios. Yo creo que el 80% de la operatividad de mis satélites se vería afectada. Y es prácticamente un demostrador tecnológico. Yo lo veo como realmente un peligro, es decir, un ataque a un sistema de navegación sería totalmente caótico para nosotros, pero también para toda la vida civil. Todo se fundamenta ya en GPS y en sistemas de navegación. Es un arma muy efectiva, digamos.
¿Existe algún plan de contingencia?
El plan de contingencia es el disponer de alternativas. Es difícil, hay que tirar el GPS. Existe Galileo, los sistemas rusos, los sistemas chinos... Esa sería la única posibilidad. Yo entiendo que el Ministerio de Defensa americano tiene sus propios planes de contingencia, a los que no sé si tendríamos acceso de forma directa.
¿Cuáles son los retos de la Agencia Espacial Española para canalizar la Defensa?
Quizás en otros países las agencias son más civiles, pero en España no se puede obviar el peso de la Defensa en la tecnología espacial. Yo entiendo que la Agencia va a simplificar todos sus procedimientos, pero Defensa va a condicionar muchos desarrollos. Es un actor fundamental, hay que contar con él, y entiendo que los que están montando la agencia saben cómo hacerlo, están bien conectados, es gente muy dialogante, tiene buenas influencias en Defensa y en el ministerio civil.
El INTA tiene un programa para desarrollar una constelación satelital propia para 2026, ¿cuál es su propósito?
Lo que vamos a hacer es continuar el programa de constelaciones del INTA y convertirlo en el programa de constelaciones de Defensa. El INTA lo que tiene que hacer es desarrollar tecnología y ponerla a disposición de los distintos organismos, tanto de Defensa como civil, porque tiene un carácter dual, y que se desarrolle esa tecnología. Queremos llegar a 2026 con una plataforma que recoja toda la tecnología que hemos desarrollado en el programa de constelaciones del INTA para ofrecer una solución viable y con la capacidad de resolver problemas complejos basado en la industria nacional, no basado en la industria europea.