La nave Orion, que ha formado parte de la misión Artemis I, llegó ayer 11 de diciembre a la Tierra después de un viaje de 25 días y medio. La cápsula amerizó en la costa del océano Pacífico, al oeste de Baja California (México), a las 18:40 (hora española).
Orion ha viajado, desde su lanzamiento el pasado 16 de noviembre, 2.253.081 km orbitando la Luna y regresando con éxito a tierra firme. El administrador de la NASA, Bill Nelson, ha asegurado que "esta prueba de vuelo es un gran paso adelante en la exploración lunar de la Generación Artemis", añadiendo que "es una gran victoria para la NASA, los Estados Unidos, nuestros socios internacionales y toda la humanidad".
El programa Artemis es el volverá a mandar a seres humanos a la Luna después de 50 años, con el objetivo de establecer bases y realizar experimentos de cara a poder pisar Marte por primera vez. El directivo de la agencia estadounidense, Jim Free, ha asegurado que con el regreso de Orion "comienza nuestro camino hacia una cadencia regular de misiones y una presencia humana sostenida en la Luna para el descubrimiento científico y para preparar las misiones humanas a Marte".
Orion tras su amerizaje (NASA).
Los logros de Orion
Tras lograr el hito de convertirse en la primera nave diseñada para astronautas en alejarse la máxima distancia de la Tierra (434.522 kilómetros), superando a Apolo 13, la última misión que pisó la Luna en 1970, Orion ha dado un nuevo paso en la exploración espacial.
Durante la misión, Orion realizó dos sobrevuelos lunares, llegando a situarse a solo 128 km de la superficie lunar, alejándose hasta 434.522 km de la Tierra. Después de la travesía, al atravesar la atmósfera terrestre, se ha probado la resistencia de la cápsula al estrés de la reentrada para valorar las condiciones en las que se encontrarán los astronautas que viajen en las próximas misiones.
Imagen de la Luna tomada por Orion (NASA).
Antes de atravesar la atmósfera, el módulo de la tripulación se separó del Módulo de Servicio Europeo (ESM), desarrollado por la Agencia Espacial Europea (ESA) y Airbus, soportando hasta 2.760 grados de temperatura. En apenas 20 minutos, Orion consiguió desacelerar desde 523 km por hora hasta los 32 km para su amerizaje.
El jefe de exploración espacial de Airbus, Marc Steckling, ha dicho que el ESM "realmente ha hecho un trabajo extraordinariamente bueno gracias al fantástico trabajo de todo el equipo". Steckling ha confesado que "fue un momento hermoso con sentimientos encontrados para nosotros, pues tuvimos que despedirnos de nuestro bebé, porque solo la cápsula de la tripulación regresó a la Tierra", algo que ocurrirá en cada amerizaje de las misiones Artemis.
El gerente de la misión, Mike Sarafin, asegura que "con el amerizaje hemos operado con éxito a Orion en el entorno del espacio profundo, donde superó nuestras expectativas y demostramos que puede resistir las condiciones extremas de regresar a través de la atmósfera de la Tierra" desde la Luna.
Próximos pasos
Los equipos de recuperación trabajan ahora para devolver a Orion a la NASA: primero a una base naval en San Diego (California) y después al Centro Espacial Kennedy (FLorida), desde el que fue lanzado. La agencia lidera el equipo conformado también por el Departamento de Defensa de EE UU, ingenieros y técnicos propios y la colaboración de Lockheed Martin.
En los próximos días, Orion será trasladado a las instalaciones de la agencia en Florida para descargar varias cargas útiles y será sometido a pruebas y análisis durante los próximos meses.