El director de la Agencia Espacial Europea (ESA), Josef Aschbacher, quiere que mejore la coordinación de la inversión pública europea en materia de espacio, y se hace eco de algunas de las recomendaciones recogidas en el recientemente publicado informe Draghi sobre la competitividad en el Viejo Continente.
Aschbacher señaló que la enorme brecha existente entre Europa y Estados Unidos a propósito del gasto en espacio se complica aún más porque esa inversión, en Europa, se reparte entre un amplio número de agencias nacionales y organizaciones continentales.
En su intervención, el 16 de septiembre, ante los asistentes a la conferencia World Space Business Week celebrada en París, el jefe de la ESA desveló que los gobiernos europeos en espacio en 2023 gastaron 11.400 millones de euros, en comparación con los 64.000 millones de euros de agencias gubernamentales estadounidenses como la NASA y la Fuerza Espacial. “Hay un factor de seis entre la inversión europea y estadounidense en el ámbito público en el espacio. Un factor de seis es mucho”, afirmó. "Ponernos al día es una tarea enorme", declaró, según informa el medio especializado Space News.
El directivo señaló que la ESA pudo conseguir un aumento del 17% en su presupuesto, ajustado a la inflación, en su conferencia ministerial de 2022, donde se fijaron niveles de financiación para tres años. "Este es un gran cambio, pero aun así tenemos que ir mucho más rápido", dijo.
El informe de la Comisión Europea publicado el 9 de septiembre y liderado por el ex primer ministro italiano y ex presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, cita cifras de gasto similares para Estados Unidos y Europa en el espacio y añade que el gasto público de China en el espacio está creciendo y superará el gasto europeo en 2030.
Sin embargo, el aumento de la financiación de la ESA por sí solo no es suficiente, afirmó Aschbacher. "Tenemos mucha fragmentación en Europa y esto es algo que debe abordarse", afirmó. La ESA representa el 60% del gasto público en el espacio en Europa, y el resto proviene de la Comisión Europea, los gobiernos nacionales y organizaciones continentales como la agencia de previsión meteorológica Eumetsat.
Gasto gubernamental anual en miles de mllones de dólares en programas espaciales. Firma: Informe Draghi
"Esto es algo que realmente hay que abordar", declaró, y lo calificó de "cuello de botella" para el crecimiento de la industria espacial en Europa. "Esta relación entre la Agencia Espacial Europea y la Unión Europea es la máxima prioridad para los próximos años", admitió.
Cuando se le preguntó cómo abordaría el problema, Aschbacher se decantó por la necesidad de una mayor coordinación entre la ESA y la Comisión Europea. Esto ya se está llevando cabo en casos específicos, como el programa de navegación por satélite Galileo y el programa Copernicus de satélites de observación de la Tierra.
Esa cooperación se rige por un acuerdo de financiación plurianual que se extiende hasta 2027. “Pero lo que estoy buscando es más bien un acuerdo estable a largo plazo que dure, diría, casi indefinidamente”, dijo. "Esto es ciertamente algo en lo que espero trabajar con la próxima Comisión Europea".
El informe Draghi no solo critica la “falta de coordinación” sino también la existencia de un “modelo de gobernanza complejo y fragmentado” para el espacio europeo. También denuncia el “descenso de los fondos públicos destinados a política espacial”, la “inversión insuficiente en I+D”, el “acceso limitado a financiación”, la “coordinación limitada entre el sector del espacio y el de la defensa” y la “dependencia internacional”.
El documento recoge cambios mucho más amplios que simplemente mejorar la coordinación entre la ESA y la Comisión. Específicamente, aconseja a la ESA eliminar su política de retorno geográfico, o georretorno, una política por la que a los estados miembros se les garantizan contratos en proporción a la financiación que ponen para programas específicos. Esta propuesta a un aspecto tan sensible probablemente no será bienvenida entre los Estados que más dinero pongan al presupuesto de la Agencia. Draghi argumenta que la supresión del georretorno busca “reducir la fragmentación de la base industrial de la UE y modernizar las normas de contratación de la UE”.
También propone el Informe Draghi que la Comisión Europea tenga un puesto en el Consejo de Gobierno de la ESA, y “una alineación más profunda de los marcos de gobernanza de la ESA con las normas de adquisiciones, financieras y de seguridad de la UE”. El objetivo es reducir el marco de gobernanza espacial europeo para rebajar “la complejidad la fragmentación y los solapamientos”.
Otras propuestas para la transformación de la industria espacial incluidas en el documento son: