La industria Aeroespacial y de Defensa se enfrenta a un período de transformación sin precedentes. Con una demanda creciente y confirmada para la próxima década, el sector ha experimentado un aumento notable en la volatilidad debido principalmente a la incertidumbre en la capacidad de la cadena de suministros de poder entregar los componentes en los volúmenes requeridos por el mercado.
Detrás de esa incertidumbre está la situación geopolítica, las tensiones comerciales globales, la inestabilidad en los mercados de materias primas que generan retrasos de producción, o la escasez de talento especializado. Todos estos factores han lastrado los resultados económicos de muchas empresas del sector aeroespacial impactando en pérdidas de EBIT de más del 3,5 % y pérdida de ingresos superior al 9 % de media en el sector. Estos desafíos requieren un enfoque estratégico y coordinado para asegurar la sostenibilidad en la cadena de suministro y no frenar el crecimiento.
Por un lado, el sector Aeronáutico europeo, formado por un gran número de empresas medianas, ha sido especialmente vulnerable a estos efectos. Además, no han podido beneficiarse equitativamente de las ayudas del programa Next Generation EU que se han focalizado en las empresas más grandes del sector. Esta distribución desigual ha producido salidas de empresas hacia otros sectores industriales, cierres, y una ralentización general de la industria, lo que conlleva a que las empresas tractoras hayan tenido que redoblar esfuerzos para gestionar a sus proveedores o incluso para internalizar algunas actividades que estaban en manos de terceros.
Por otro lado, la industria Aeroespacial, debido a la complejidad de su cadena de suministros, tiene unos tiempos de entrega de materiales muy largos, obligando a los actores del sector a incrementar sus inventarios, lo cual aumenta la tensión de caja y los costes. Para mitigar los riesgos de este ‘ramp up’ en la cadena de suministro hay tres acciones que las compañías deben hacer para poder crecer en este momento.
En primer lugar, planificar a largo plazo integrando a todas las fuentes de suministro y tener soluciones que permitan simular escenarios de incremento de capacidad o de creación de otras fuentes, además de medir la eficiencia en tres tiempos de respuesta (detección, reacción y resolución de problemas).
En segundo lugar, asegurar la capacidad industrial y dar visibilidad a los proveedores para que estén preparados y reserven el material necesario cuando se requiera. En esta línea, las empresas tractoras deben hacer test de stress de manera regular para confirmar la capacidad real de la cadena de suministros.
En tercer lugar, integrar las herramientas tecnológicas adecuadas que desempeñan un papel clave para para asegurar la disponibilidad de materiales y reducir los tiempos de entrega. Algunos ejemplos son: la implementación de gemelos digitales, que permitan la representación digital de toda la red de proveedores que aportan material para el producto del OEM, con independencia de que muchos de ellos no tengan relación contractual con el tractor; las Alarmas en la torre de control para proporcionar visibilidad de los materiales en tránsito y anticipar la disrupción en los suministros. Estas señales se nutren de información transaccional intercambiada entre proveedores y fabricantes, y se completa con datos históricos y datos logísticos externos; la Tecnología de análisis avanzadas equipadas con IA que ayuda a identificar patrones de comportamiento y a predecir escenarios potenciales, mejorando así la planificación y la gestión de la producción. Se estima que el 29% de las horas actualmente dedicadas a la función de cadena de suministro podrían automatizarse, surgiendo un 14% de nuevas actividades derivadas de los nuevos datos y modelos de funcionamiento gracias a la IA. Por tanto, una función mucho más predictiva, digital y de valor.
En conclusión, para enfrentar los desafíos actuales del ‘ramp up’, es imprescindible que la cadena de suministro de la industria Aeroespacial y de Defesa se estructure entorno al propósito de agilidad. Solo mediante la adopción de enfoques colaborativos de todos los integrantes de la cadena de suministros, el uso de la tecnología, y la definición de nuevos roles y cultura digitales, la industria podrá superar los obstáculos actuales y asegurar un futuro sostenible.
La clave para lograrlo está en la capacidad de las empresas de adaptarse ante las condiciones del mercado y en apoyo de las empresas tractoras a la cadena de para adoptar nuevas tecnologías y orquestar el intercambio de datos de manera fluida y ágil. Si las compañías y organismos no aprovechan ya las oportunidades que brinda la digitalización para mejorar la eficiencia de la cadena de suministros en el sector Aeroespacial y de Defensa, quedarán atrás en la carrera hacia la reinvención.