La industria está abocada en cuál será el relevo de la Estación Espacial Internacional (ISS por sus siglas en inglés), que debería cumplir su vida útil hacia comienzos de la próxima década. En ese contexto, Voyager Space y Airbus Defence and Space, empresas que hace un par de meses firmaron una alianza para construir y operar su proyecto Starlab, ahora redoblan la apuesta: el Sales Director Space Exploration de Airbus, Ulrich Kuebler, reveló en Sutus 2023 (Space & Underwater Tourism Universal Summit) que "se lanzará de una sola vez, en 2028, y podrá albergar a ocho personas".
Con respecto a los tiempos, hace unos días la NASA lanzó una convocatoria para el desarrollo del desorbitador de la ISS. La compañía (o el consorcio) adjudicataria debe traer de vuelta a la Tierra a la estación de una forma segura y controlada para evitar las zonas pobladas en el Espacio.
En la misma línea, Kuebler explicó en el evento realizado en Marbella que "este es el momento para que Airbus se plantee este gran desafío para la humanidad. La actual EEI se quedará obsoleta muy pronto y habrá que pasar página. StarLab supondrá un punto de habitabilidad seguro, estratégico y sostenible, para que podamos ir a la Luna o llegar hasta Marte, de una forma más eficaz".
El directivo detalló, además, que se trata de un "nuevo concepto de estación espacial". Se trataría de una plataforma autónoma, con ocho metros de diámetro y tres pisos. "Son dos tercios del volumen de la actual EEI y la idea es que pueda llegar a ser toda una flota de estaciones espaciales en el futuro y que se fabriquen en serie".
Firma: Starlab Space LLC
Sin embargo, no es la única propuesta. SpaceX y Vast esperan lanzar en 2025 (tres años antes de la propuesta de Airbus) Vast Haven-1, la que se espera que sea la primera estación espacial comercial del mundo. Esa no sería la única novedad de la empresa de Elon Musk, ya que sería pionera en ser enviada al Espacio sin pertenecer a una agencia gubernamental.
¿Asentamientos humanos en el Espacio?
Otro de los temas relevantes de Sutus fue la posibilidad de que la humanidad forme asentamientos fuera de la Tierra. En ese sentido, el líder de Ilewg-EuroMoonMars y ex científico de la Agencia Espacial Europea (ESA), Bernard Foing, contó que "hace 25 años tuvimos una visión de las distintas agencias espaciales, los científicos y la comunidad educativa, para crear el proyecto Moon Village, el primer asentamiento humano en la Luna".
Por otro lado, el fundador de Green Moon Project, José María Ortega-Hernández, dijo que su iniciativa está pensada para "crear invernaderos encapsulados que fabriquen oxígeno en la Luna y en las estaciones espaciales". Además, aseguró que están trabajando con alimentos de rápido crecimiento y ricos en proteínas, para poder cultivar más allá de nuestro planeta.