Hispasat amplía hasta 2024 el contrato de servicios de conectividad marítima con Omniaccess

Hispasat ha renovado con el prestador de servicios de conectividad en entornos marítimos Omniaccess para ofrecer cobertura a zonas con un importante tráfico marítimo. El nuevo contrato en vigor amplía la relación hasta 2024 y multiplica por seis la capacidad espacial arrendada.

Los satélites de Hispasat en las posiciones orbitales en 30º oeste y 61º oeste, combinados con el telepuerto de Omniaccess en Palma de Mallorca, permiten ofrecer unos servicios de comunicaciones especialmente diseñados para entornos marítimos y desplegar así soluciones de entretenimiento, ciberseguridad y valor añadido para la tripulación a bordo de embarcaciones de recreo con una alta demanda de conectividad (como cruceros y yates) en el Caribe y el Mediterráneo.

El consejero delegado de Omniaccess, Carlos Carbajal, ha señalado que "mantenemos con Hispasat una relación de confianza basada en sus buenas coberturas sobre áreas de gran tráfico marítimo y en la fiabilidad y flexibilidad de su servicio, por lo que estamos convencidos de que este nuevo contrato será todo un éxito comercial".

Un sector de casi 2.000 millones de euros en 2030

Por su parte, el director comercial de Hispasat, Ignacio Sanchis, ha añadido que están "muy agradecidos a Omniaccess por su deseo de ampliar la capacidad contratada sobre el Caribe y el Mediterráneo para la próxima temporada". Y concluyó: "Contamos con una amplia experiencia en la prestación de servicios de conectividad marítima y creemos que va a ser uno de los principales vectores de crecimiento para los próximos años".

El sector de la conectividad en entornos marítimos alcanzó en 2020 unos ingresos de casi 1.000 millones de euros, pero para 2030 se espera que esta cifra se doble según los datos de Euroconsult. Asimismo, la demanda de capacidad se espera que se multiplique por ocho de aquí a 2030, especialmente en las embarcaciones recreativas y de transporte de personas -como cruceros, ferris y yates-, ya que en ellas los pasajeros utilizan de forma creciente el ancho de banda disponible a bordo para aplicaciones de entretenimiento o de vídeo bajo demanda.