Por Daniel Marín / Blog Eureka / Las Palmas de Gran Canaria, España.-
Hoy la cápsula Dragon C2+ ha sido capturada por el astronauta Don Pettit usando el brazo robot de Estación Espacial Internacional (ISS). Después de un impecable lanzamiento y un vuelo prácticamente perfecto, la nave de SpaceX se ha acoplado al puerto nadir del módulo Harmony de la ISS. Los medios de comunicación no han escatimado alabanzas a la hora de describir la noticia. "Momento histórico", o "un punto de inflexión en la historia de la exploración espacial" son algunos de los titulares que hemos podido leer hoy.
Pues lamento ser un aguafiestas, pero creo que esta misión no es en absoluto histórica. Importante, sí. Interesante, sin duda. Crucial para el futuro de la NASA, es posible. Pero, ¿histórica? Lo siento, pero para mí histórica fue la misión de Gagarin, los vuelos del programa Apolo o la misión Cassini-Huygens, por poner un par de ejemplos. Si me apuras, la última misión del transbordador espacial podría entrar dentro de esta categoría, pero poco más. Será que en estos asuntos tengo el listón muy alto, pero yo no veo el momento histórico por ningún lado. Intentaré justificar mi punto de vista:
1-¿Es el primer vehículo de carga que se acopla a la ISS?No. Decenas de naves de carga Progress rusas se han acoplado con la ISS desde el inicio del proyecto, además de tres naves ATV europeas y dos HTV japonesas. Por otro lado, la Dragon carece de capacidad para trasvasar combustible y poder elevar la órbita de la ISS, una característica vital para mantener en servicio la ISS que sólo poseen las naves Progress y las ATV.
2- ¿Es acaso la primera cápsula Dragon que viaja al espacio? No, la primera Dragon operativa alcanzó el espacio durante la misión C1 en diciembre de 2010. Aunque no se trataba de un vehículo completo -carecía de paneles solares y sección trasera- la cápsula reentró en la atmósfera terrestre con éxito y demostró la viabilidad del diseño.
3- ¿Es el primer vehículo moderno que se ha acoplado a la ISS?Tampoco. Tanto el ATV europeo como el HTV japonés -ambas naves más grandes y con mayor capacidad de carga que la Dragon- fueron diseñados específicamente para la ISS. Por otro lado, no son naves antiguas. El ATV debutó en 2008 y el HTV sólo un año después.4- Entonces, ¿es el primer vehículo de carga que se acopla con el segmento norteamericano de la ISS (USOS)? No. Dos HTV japoneses ya se han acoplado con el USOS usando el brazo robot canadiense, exactamente igual que la Dragon. Y yo no vi semejante revuelo cuando el primer HTV visitó la estación, ni de lejos.
5- ¿Será la Dragon la única nave de carga norteamericana a partir de ahora?¿Es la Dragon más barata o eficiente que las otras naves de carga?
No. La Cygnus de Orbital también llevará suministros a la ISS, complementando la labor de la Dragon. En cuanto a la segunda pregunta, y pese a las declaraciones de SpaceX, nadie lo sabe. Pero ahora mismo es un vehículo que carece de una historia operacional lo suficientemente larga para sacar conclusiones definitivas
Si este vuelo hubiese cumplido con alguno de los hitos arriba mencionados, entonces sí podríamos decir que estamos ante una misión más o menos histórica, pero no es el caso. Entonces, ¿a qué viene tanta algarabía? La Dragon es la primera nave de carga norteamericana que se acopla a la ISS después de la retirada del transbordador espacial y eso la hace especial, por supuesto, pero no creo que debamos exagerar (a no ser que consideremos, claro está, que el acoplamiento del primer HTV fue un momento histórico en la conquista del espacio). Cierto es que la Dragon posee una cápsula recuperable que podría servir para desarrollar una versión tripulada, pero no debemos olvidar que una Dragon con capacidad para transportar astronautas queda aún muy lejos. No se trata solamente de poner siete asientos dentro de la cápsula y ya está. SpaceX debe desarrollar primero un sistema de escape y aterrizaje, así como complejos sistemas de soporte vital, además de asegurarse de que el vehículo es fiable para vuelos con seres humanos a bordo, una tarea nada sencilla. Por supuesto, si finalmente la Dragon se convierte en la próxima nave tripulada de los EEUU, eso sí que sería un momento histórico.
¡Ah!, se me olvidaba. Se supone que esta misión también es histórica porque es la primera nave "privada" que se acopla a la ISS. ¿No merece esta "hazaña" algo de reconocimiento? Independientemente de si consideramos que el acoplamiento de una nave espacial privada tenga que ser forzosamente algo positivo -yo tengo mis dudas-, lo cierto es que me niego a llamar privada a una nave que ha sido construida gracias a varias y muy generosas subvenciones de la NASA, tanto directas (programas COTS, CCDev, etc.) como indirectas (rampas de lanzamiento y demás infraestructuras construidas con dinero público). Cuando la Dragon tenga algún otro cliente además de la NASA -¿Bigelow?-, entonces y sólo entonces podríamos hablar de iniciativa privada como tal. Hasta entonces, estamos ante un programa creado y desarrollado en exclusiva mediante dinero público.En estos tiempos de crisis y apatía en el sector espacial, es natural que nos ilusionemos con cualquier novedad. La Dragon es un proyecto tremendamente interesante que aporta frescura y novedad a las "rutinarias" operaciones de la estación espacial. SpaceX se ha marcado un tanto con esta misión y ha demostrado que tiene lo que hay que tener para mandar una nave espacial hasta la ISS. El panorama espacial resulta hoy un poco más entretenido que ayer, pero no permitamos que la euforia nos ciegue. No se trata de restarle ningún mérito a esta misión. Al contrario, debemos reconocer que estamos ante un gran éxito de SpaceX, sí, pero la Historia, con mayúsculas, es más importante que el acoplamiento de una simple nave de carga.
Actualización: mucha gente me ha apuntado amablemente que el mérito de la Dragon está en su bajo precio y que se trata de un carguero barato comparado con el resto de naves espaciales. Por otro lado, el gran @wicho me ha señalado por Twitter que no es cierto que todo el dinero que ha recibido SpaceX sea público, puesto que Elon Musk puso una importante cantidad como inversión inicial de la empresa.
Bien, vayamos por partes. Primero, aclarar que el tema económico alrededor de SpaceX es un asunto muy complejo y nebuloso. SpaceX ha hecho públicos una lista de preciosde sus servicios, pero nada garantiza que se ajusten al coste real de los mismos, una situación que por otro lado se puede hacer extensible a otras compañías aeroespaciales como ULA o Khrúnichev, sin ir más lejos. En cuanto a las subvenciones recibidas por SpaceX, el asunto se complica aún más. Primero, porque se suele olvidar que el desarrollo del cohete Falcon 1 -lanzador que permitió crear las tecnologías asociadas al Falcon 9- contó con la subvención de la agencia militar DARPA. Segundo, porque no está nada claro cuánto dinero ha recibido SpaceX exactamente en los últimos años. Y no me refiero a los presupuestos de los programas COTS, CRS o CCDev, sino a otros muchos contratos firmados entre SpaceX y el gobierno federal norteamericano. Por ejemplo, SpaceX ha tenido acceso de forma totalmente gratuita a determinadas tecnologías espaciales, como es el caso de los sistemas de acoplamiento y guiado de la Dragon, lo que le ha permitido a esta empresa ahorrarse mucho tiempo y dinero en el desarrollo de sus sistemas. Del mismo modo, SpaceX puede usar sin prácticamente coste alguno las instalaciones de lanzamiento en Cabo Cañaveral (SLC-40) y Vandenberg (SLC-4E), construidas a un coste altísimo mediante fondos públicos durante las pasadas décadas. Como vemos, SpaceX se ha aprovechado ampliamente del sector público, ahorrándo una importante cantidad de dinero en el desarrollo de sus infraestructuras. Una cantidad que no aparece en los balances de la empresa, por supuesto.En todo caso, le doy la razón a @wicho en que gracias a Musk existe SpaceX y que no todo el dinero de la empresa viene de fondos públicos (de hecho, el propio Musk ha declarado que ha invertido más de 100 millones de su fortuna personal en SpaceX). Eso sí, sin la DARPA y la NASA no tendríamos ni Dragon ni Falcon 9.
Pero entremos en materia. SpaceX se ha gastado unos 300 millones de dólares en el desarrollo del Falcon 9 durante cuatro años y medio, mientras que para desarrollar la nave Dragon ha invertido una cifra similar en cuatro años. Entre 2002 y 2010, la empresa ha invertido oficialmente un total de 800 millones de dólares en el desarrollo del Falcon 1, el Falcon 9 y la Dragon. Y todo ello, con una plantilla de aproximadamente 1500 personas. SpaceX promete lanzar anualmente hasta ocho cohetes Falcon 9 por un precio total de mil millones de dólares, o sea, unos 700 millones menos que el precio ofertado por ULA (que gestiona los lanzadores Atlas V y Delta 4). Además promete lanzar el Falcon Heavy -con una capacidad de 53 toneladas en LEO- por 125 millones por misión.
Todo esto teniendo en cuenta que SpaceX ha firmado contratos de lanzamiento (la mayoría gubernamentales) para los próximos años por un valor de 3000 millones de dólares. SpaceX firmó entre 2005 y 2008 varios contratos IDIQ con la USAF por un valor de unos mil millones de dólares. En 2006 la NASA firmó con SpaceX un contrato COTS de 278 millones de dólares, contrato que sería ampliado en 2008 al ganar el concurso CRS por un valor de 1600 millones de dólares. A estas cantidades debemos sumar los 75 millones de la NASA del contrato CCDev 2. Aunque muchos de estos contratos son condicionales (esto es, la empresa no recibirá el dinero hasta que cumpla con su parte del mismo), SpaceX tiene en la actualidad unos fondos de unos mil millones de dólares, de los cuales 200 millones provienen de inversores privados (Musk incluido) y el resto de contratos, la mayoría con el gobierno federal (unos 500 millones de la NASA).Por lo tanto, ¿acaso no estamos ante una empresa subvencionada mayoritariamente mediante dinero público?
Con estas cifras en la mano, SpaceX parece que se consolidará en los próximos años como un líder en el mercado de lanzamientos espaciales, aunque por supuesto todavía tiene que demostrar que pueden cumplir con los plazos y precios ofertados (una vez más, la eterna cuestión: ¿están los precios de SpaceX ajustados a los costes?, es decir, ¿son reales o forman parte de una burbuja que depende de inversiones continuas?). En definitiva, todo fantástico, pero hay que tener en cuenta que aquí hablamos de la ISS y el programa espacial tripulado. A este respecto, me parece injusto comparar la Dragon con el HTV o el ATV. Son naves mucho más caras, sí, pero también mucho más complejas, grandes y con mayor capacidad. Además, ¿quién dice que la NASA no habría podido desarrollar una nave con las capacidades de la Dragon sin recurrir al programa COTS?Por último, si hacemos caso a las cifras de SpaceX, una misión de carga de la Dragon a la ISS sale por 133 millones de dólares. Más barato que un ATV o un HTV, por supuesto, pero más cara que una Progress. El gobierno ruso "compra" las Progress y Soyuz a la empresa RKK Energía -que no es pública-, así que si hablamos en términos puramente comerciales, las Progress serían las primeras "naves privadas" que se hayan lanzado hacia la ISS. La paradoja del caso es que a la NASA le saldría más barato pagar a los rusos como venía haciendo por el transporte de carga a la ISS -de hecho, sigue pagándoles- en vez de comprar naves Dragon.Resumiendo, no, la Dragon no es la nave espacial más barata que se haya acoplado con la ISS.