Infoespacial.com ofrece la segunda y última parte de la entrevista exclusiva a Juan Carlos Cortés Pulido, director de la Agencia Espacial Española (AEE), organismo estatal adscrito al Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades y al Ministerio de Defensa.
En esta segunda entrega, que forma parte del monográfico Perfiles Infodefensa sobre la industria espacial, Cortés desgrana los principales proyectos espaciales nacionales, las previsiones de inversión para 2025 y la futura Ley del Espacio.
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¿Qué buscan más, el desarrollo de programas nacionales o que España tenga más peso en los internacionales?
La Agencia Espacial Española pondrá en marcha programas nacionales mientras colabora a escala internacional, con el objetivo de posicionarse estratégicamente como un actor relevante a nivel global. Nuestro propósito es desarrollar un sector que pueda responder a las necesidades y ambiciones del país, sin perder de vista el contexto internacional.
La AEE tiene la responsabilidad de proponer la política espacial de España. A través de los programas nacionales, la Agencia podrá establecer prioridades que garanticen la autonomía estratégica y la seguridad nacional. Sin embargo, aislarse no es una opción viable. El desarrollo del espacio ocurre en un entorno colaborativo, y nuestra ambición es fortalecer nuestro papel en este ámbito, tanto en la Agencia Espacial Europea (ESA) como en la Unión Europea, al mismo tiempo que promovemos otras colaboraciones que nos conviertan en un socio relevante a nivel internacional.
Los desafíos científicos y tecnológicos son enormes. Un país no puede asumir en solitario las grandes misiones que nos permiten avanzar en el conocimiento, abordar hazañas significativas en la exploración espacial o proporcionar los servicios más avanzados y precisos en comunicaciones, navegación, observación de la Tierra y vigilancia espacial.
Es imprescindible desarrollar resiliencia frente a crisis globales, incluyendo el cambio climático y la inestabilidad geopolítica. Se requiere una capacidad espacial sólida que prevenga y responda a desastres, proporcione seguridad y resiliencia, y contribuya a la estabilidad económica. Solo un enfoque integrado y coherente de programas nacionales e internacionales permitirá crear un ecosistema robusto que beneficiará tanto a la industria espacial nacional como a la posición de España en el escenario global.
La implementación de sistemas espaciales de uso dual, que puedan servir a fines tanto civiles como militares, resulta crucial en un entorno donde las amenazas y desafíos están en constante evolución. Entre los programas de defensa actuales, destaca el SpainSat NG, que incluye el lanzamiento de dos satélites, el primero programado para finales de 2024 y el segundo para junio de 2025. Estos satélites proporcionarán sistemas de comunicación seguros y resilientes, que posicionarán a España entre los países con las tecnologías más avanzadas en este ámbito. Además, el programa PAZ, un satélite de observación que utiliza tecnología radar, sigue siendo un activo crucial para la obtención de inteligencia en tiempo real y su vida útil se ha extendido gracias a su rendimiento excepcional.
A corto plazo, se prevé la puesta en marcha de otros proyectos como el PAZ II, que mejorará significativamente la capacidad de observación con su tecnología avanzada, y el programa Iris2, que tiene como objetivo lanzar una constelación de satélites para comunicaciones gubernamentales seguras dentro de la UE. Estos desarrollos son esenciales no solo para satisfacer las necesidades de las Fuerzas Armadas españolas, sino también para contribuir a los esfuerzos de seguridad y defensa europeos.
La AEE, por tanto, debe jugar un papel clave en la configuración de la política espacial de España. Debe garantizar que se desarrollen capacidades efectivas que incluyan sistemas espaciales de uso dual. Esto permitirá a España no solo ser más independiente, sino también un actor relevante en el contexto global, gracias a la cooperación en iniciativas internacionales y la innovación tecnológica en el sector espacial.
¿Cuál está siendo la inversión de la AEE en 2024 y la previsión para 2025?
La Agencia, establecida en 2023, está en pleno proceso de fortalecimiento y posicionamiento. En 2024, la AEE está gestionando una inversión significativa que se prevé que supere los 100 millones de euros, destinada a mejorar nuestras capacidades nacionales y a impulsar la participación en iniciativas internacionales. Esta inversión se enfocará en investigación y desarrollo, colaboración público-privada y el avance de tecnologías emergentes.
La creación de estructuras que optimicen la eficiencia operativa está en marcha, lo que permitirá a la AEE centrarse en la planificación estratégica y en iniciativas alineadas con las necesidades del sector y de la sociedad. Con este enfoque, se anticipa que, en 2025, la inversión aumentará, reflejando el éxito de los programas y la ejecución efectiva de los planes en curso. La AEE no solo busca fortalecer la infraestructura, sino también crear un ecosistema innovador que fomente el desarrollo de talento y la colaboración entre distintos actores.
El Gobierno de España ha afirmado su compromiso con los proyectos espaciales, destinando 2.403 millones de euros hasta 2027 en el marco del Plan Estatal de Investigación Científica, Técnica y de Innovación (Peicti) 2024-2027, con una inversión total prevista de más de 18.000 millones de euros. De este presupuesto, el 13% está reservado para proyectos del sector espacial.
La contribución a la ESA ha aumentado a 300 millones anuales, lo que refleja una apuesta significativa por la ciencia en el país. La ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, ha subrayado que este plan representa un aumento del 32% en inversión anual en comparación con el periodo anterior, y ha enfatizado el impacto positivo que esto tendrá en la sociedad y el futuro del sector espacial en España.
En este contexto, la AEE se compromete a trabajar de la mano con todos los actores para maximizar el retorno de estas inversiones, buscando beneficios a nivel nacional e internacional.
¿Se precisa una Ley del Espacio en España?
Como director de la Agencia, considero que la futura Ley del Espacio es una necesidad urgente para el avance del sector espacial en nuestro país. Actualmente, la ausencia de un marco legal específico ha colocado a nuestras empresas en desventaja frente a competidores internacionales que operan bajo normativas claras y eficientes. Con el desarrollo y la evolución de la política espacial de la Unión Europea, se hace imperativo establecer una regulación que rija tanto las actividades públicas como las privadas en el espacio ultraterrestre. Esta legislación debe alinearse con los principios de los tratados internacionales y responder a las particularidades de nuestra industria.
El nuevo marco normativo no solo facilitará la supervisión y garantizará la seguridad jurídica, sino que también incentivará la inversión y la generación de empleo de calidad en este ámbito estratégico para la economía española. Con un sólido enfoque en investigación, desarrollo e innovación, España posee el potencial para maximizar los beneficios provenientes de la inversión en tecnología espacial, al impulsar iniciativas innovadoras que refuercen nuestras capacidades.
Además, en el contexto geopolítico actual, es crucial que fortalezcamos nuestra autonomía estratégica y la habilidad para enfrentar los desafíos propios del espacio, como los problemas relacionados con la basura espacial y el tráfico orbital. Así, el diseño de una legislación nacional que contemple estos aspectos es fundamental para integrar nuestras actividades dentro de un marco más amplio europeo, afianzando nuestra posición como una potencia espacial dentro de la Unión.
De este modo, la implementación de la Ley del Espacio no solo beneficiará a la industria nacional, sino que también aumentará nuestra competitividad en el escenario internacional y optimizará los beneficios de la inversión pública en este sector vital. Esta legislación será clave para fomentar la creación de empleo, estimular la innovación y permitir que España no solo participe, sino que también lidere en la era espacial europea. Estoy convencido de que éste es un paso esencial hacia un futuro en el que podamos gestionar nuestras capacidades espaciales con éxito y autonomía en un entorno de creciente competencia.
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