Andalucía ocupa un lugar privilegiado en la historia aeronáutica española, bien como cuna de importantes figuras que aportaron su conocimiento y sabiduría al desarrollo de la aviación, y también como una de las principales industrias del país, que facturó en 2015 un total de 2.343 millones de euros y creó 1.052 nuevos empleos directos. Un sector que mantiene y aumenta las cifras de crecimiento a pesar de la coyuntura económica adversa en estos años, y cuyos datos refuerzan la posición que mantiene Andalucía como segunda región en esta actividad a nivel nacional y como uno de los tres polos aeronáuticos más importantes de Europa, junto a Toulouse y Hamburgo. Entre los factores que permiten la consideración del sector industrial aeroespacial como estratégico para la Comunidad Autónoma de Andalucía se encuentran su aportación a la economía andaluza, su repercusión sobre el empleo industrial y su carácter de alta tecnología, que no solo se concentra en las grandes firmas, también se extiende a la importante industria auxiliar que se genera a su alrededor, como motor también de innovación y desarrollo en el contexto productivo andaluz.
El aeronáutico, por tanto, sigue consolidándose como un sector estratégico, pero hay que ser autocrítico y afrontar las debilidades que presenta para poder fortalecerlas en el futuro más próximo. Un reciente estudio presentado confirma la necesidad de una mayor inversión en I+D+i y en las nuevas tecnologías del sector, que de momento es limitada. Pero por otra parte también revela que presenta otras oportunidades que debemos aprovechar, entre las que se encuentra la industria espacial, que aún sigue siendo minoritaria en Andalucía. La Fundación Hélice (clúster de aeronáutica de Andalucía) es consciente de la necesidad de seguir proponiendo acciones para incrementar la visibilidad del sector espacial, en consonancia con las tendencias nacionales y europeas. El nuevo Plan de Acción del Sector Aeroespacial, en el que ya está trabajando la Junta de Andalucía, lo reconoce como una actividad estratégica de alto valor añadido; las inversiones espaciales en Europa ya han demostrado su efecto multiplicador, al igual que las tecnologías desarrolladas en este ámbito tienen una aplicabilidad comercial directa en otros campos, como el medio ambiente, el turismo o la agricultura. De hecho, en Andalucía ya existen más de 160 agentes, entre grupos de investigación, centros tecnológicos e institutos de investigación y empresas que trabajan en el sector espacial. Ya se desarrollan en Andalucía componentes para satélites, algún componente estructural de lanzadores espaciales o nuevas aplicaciones que emplean la señal del sistema europeo de navegación por satélite Egnos-Galileo, entre otros desarrollos.
Algunas de estas empresas, centros de investigación y tecnológicos que operan en el sector espacial, forman parte de Hélice, como el Centro Avanzado de Tecnologías Aeroespaciales (Catec). El Catec es uno de los principales centros tecnológicos a nivel nacional y europeo, y de los más activos en proyectos del sector espacial. De hecho es uno de los miembros fundadores, junto al Centro de Tecnologías Aeronáuticas y Tecnalia Corporación Tecnológica, de Trispace, una nueva alianza cuyo objetivo principal es unir recursos y ofrecer una más completa y atractiva capacidad tecnológica y de servicios. Con ella se busca generar y desarrollar nuevas oportunidades de negocio para la industria del espacio en Europa y el ámbito internacional, a través de la investigación aplicada. Entre estas líneas de especialización se encuentran el aligeramiento de componentes y estructuras para el sector espacial; la validación de subsistemas (ensayos y certificación de componentes, equipos y sistemas, etc.); materiales de alta temperatura; la robótica y la tribología; procesos avanzados de producción (fabricación aditiva o impresión 3D) e inspección no destructiva; sistemas embarcados; comunicaciones avanzadas y transferencia tecnológica. La puesta en marcha de Trispace ofrece a la industria espacial un punto de encuentro centrado en el diseño, fabricación y pruebas de las naves espaciales, satélites, vehículos de lanzamiento y las tecnologías relacionadas con el espacio, que reúne a ingenieros e investigadores con los encargados de tomar las decisiones globales desde el ámbito gubernamental y comercial en el sector espacio.
Hélice también forma parte del consejo asesor de la primera Incubadora de Transferencia de Tecnología Aeroespacial impulsada por la Cámara de Comercio de Sevilla, ubicada en el Parque Tecnológico Aeroespacial de Andalucía, Aerópolis. Su objetivo principal es la puesta en marcha y primera consolidación de empresas start up ligadas al sector aeronáutico y espacial, participando en el cambio de modelo productivo que se está generando en España hacia la creación de compañías innovadoras, tecnológicas y de mayor valor añadido.
La Semana Mundial del Espacio, un evento celebrado a nivel internacional desde 1999, también tuvo en Andalucía su propia programación el pasado mes de octubre. Hélice tuvo en ella un papel activo como integrante del comité organizador. Sevilla albergó diferentes actividades para divulgar a la ciudadanía la contribución de la ciencia y la tecnología espacial a la mejora de la vida cotidiana en múltiples aspectos, como la salud, la movilidad, la seguridad y la agricultura, entre otros. Asimismo, esta World Space Week sirvió como contexto para concienciar de las capacidades y del potencial del sector espacial en Andalucía y coordinar el esfuerzo de los agentes públicos y privados para impulsar su crecimiento a partir de la ya consolidada industria aeronáutica andaluza. Es un importante reto que debe marcar nuestra agenda de trabajo para conseguir que el sector aeroespacial andaluz se convierta, en un futuro que esperamos no sea muy lejano, en otro de los pilares de nuestra economía.