Airbus ha completado con éxito la fabricación y las pruebas del primero de sus satélites avanzados MetOp-SG A, lo que marca un hito significativo en la misión meteorológica global de la Agencia Espacial Europea (ESA) y Eumetsat.
El satélite de cuatro toneladas de peso ya está completamente preparado para su próxima misión, cuyo lanzamiento mediante un cohete Ariane 6 está previsto para mediados de agosto, para ofrecer una gran cantidad de nuevos datos meteorológicos que mejoren la predicción meteorológica diaria, la monitorización del clima y los estudios atmosféricos. En junio, según fuentes de Airbus, la plataforma será trasladada a la Guayana Francesa donde se encuentra el Puerto Espacial de Kourou.
La integración de MetOp-SG A1 se completó en octubre de 2024 en las instalaciones de Airbus en Toulouse, con la instalación del Interferómetro de Sondeo Atmosférico Infrarrojo de Nueva Generación (IASI-NG), el instrumento más complejo del satélite. Ya se habían integrado a bordo otros cinco instrumentos: METImage (radiómetro de imágenes multiespectrales), Copernicus Sentinel-5 (espectrómetro UVNS), 3MI (Cámara de Imágenes Multipolarizada Multicanal con Visualización Múltiple), MWS (Sonda de Microondas) y RO (Radio Ocultación). Tras este hito clave, finalizó la campaña de pruebas ambientales, demostrando la preparación del satélite para su lanzamiento.
Estos satélites transportarán una serie de instrumentos de vanguardia diseñados para mejorar la precisión y la eficiencia de la predicción meteorológica, con aplicaciones que abarcan escalas regionales y globales.
Los satélites ofrecerán una visión inigualable del cambio climático, la contaminación atmosférica, la oceanografía, la hidrología y otros servicios esenciales como la gestión de desastres.
La constelación MetOp-SG consta de dos series, A y B, cada una compuesta por tres satélites. La serie A, construida por Airbus en Toulouse (Francia), proporcionará imágenes ópticas y de microondas, así como perfiles verticales de la humedad atmosférica, la temperatura, la composición química y los aerosoles, así como detección de nubes.
Por otro lado, la serie B, construida por Airbus en Friedrichshafen (Alemania), está equipada con instrumentos de microondas avanzados que permiten medir la precipitación, la temperatura en diferentes capas atmosféricas y características de la superficie, como los vientos oceánicos, incluso a través de la nubosidad. El MetOp-SG B1 estará listo en 2026. El A2 y el B2, lo estarán siete años después y el A3 y el B3, en otros siete.
La próxima misión MetOp-SG desempeñará un papel vital para mejorar nuestra comprensión del sistema climático en evolución de la Tierra, optimizar las predicciones meteorológicas e impulsar los esfuerzos para mitigar los efectos del cambio climático.
Sentinel-5
También está integrado a bordo del MetOp-SG A el Copernicus Sentinel-5, un espectrómetro UVNS (espectrómetro ultravioleta, visible, infrarrojo cercano y de onda corta) que contribuirá a mejorar la monitorización de la calidad del aire, los cambios en la capa de ozono y las emisiones de los incendios forestales. Sentinel-5 es uno de los llamados «centinelas atmosféricos», diseñados para responder a preguntas relacionadas con la composición de la atmósfera terrestre: su misión es monitorizar globalmente la distribución de gases traza atmosféricos y aerosoles (partículas) a largo plazo, en apoyo del programa de vigilancia climática Copernicus de la Unión Europea.
Airbus lidera un consorcio industrial de más de 110 empresas en 16 países europeos y Canadá, contribuyendo al éxito de la misión MetOp-SG. La vida útil de cada satélite es de 7,5 años, con un período de cobertura operativa de 21 años durante toda la misión. El presupuesto de la misión MetOp-SG ascendía inicialmente a 3.300 millones de euros, pero ha llegado a los 5.000 millones por los retrasos en la ejecución, según fuentes de Airbus.