El director de la Agencia Espacial Española, Juan Carlos Cortés, ha pedido que aumente "la inversión per cápita" dentro del sector espacial nacional y ha apostado por "fomentar un campeón nacional" dentro de este segmento productivo.
"Estamos entre los 10 primeros países de todo el mundo, pero en inversión per cápita estamos en el puesto 17º", ha admitido Córtes ante un selecto y nutrido grupo de represesentantes de empresas y organizaciones vinculadas con el espacio, reunidos todos en un desayuno informativo titulado: La Agencia Espacial Española en el nuevo orden organizado por el Club Diálogos por la Democracia.
Junto a él presidiendo el acto estaban Santiago Bolibar, presidente de Hisdesat; Pedro Duque, presidente de Hispasat; Enrique Fraga, director de Sistemas Espaciales EST de GMV; Luis Furnells, presidente del Grupo Oesía; Fernando García Martínez-Peñalver, director de Indra Espacio; y Carlos Laborda, presidente de Aicox. Todos ellos han alabado su nombramiento y experiencia.
Cortés ha compartido con los asistentes muchas reflexiones sobre el presente y el futuro del sector; también ha hablado de la génesis de la Agencia, de la que ha detallado sus retos, sus objetivos y sus prioridades estratégicas.
"El espacio es un actividad poliédrica", ha indicado Cortés, en cuanto que se relaciona con la sostenibilidad, la industria y la cooperación. Citando a su colega portugués, Ricardo Conde, Cortés ha subrayado que en cuanto a preocupación ciudadana, la seguridad ha sobrepasado a la sostenibilidad "y para la seguridad el espacio es indispensable".
"También hay un elemento económico", ha declarado el director de la AEE, pues "el espacio es un bien público", pero ha habido, en su opinión, "un fallo del mercado", esto es, el mercado no ha asignado suficientes recursos de manera eficiente. No obstante, "tenemos un sector industrial competiitivo que puede liderar proyectos completos, con empresas que realizan lanzamientos suborbitales y en toda la cadena de valor", ha estimado, sin olvidar "dos magníficos operadores de satélites" (HIspasat e Hisdesat) y centros de de vanguardia como el INTA.
La Agencia, que órganicamente dentro de la Administración tiene un nivel de subsecretaría, "va a ser el canal de comunicación con el exterior, pero no de forma individual". Es una agencia de gestión y no de ejecución a diferencia de sus colegas francesa (CNES) e italiana (ASI) que desempeñan esa doble misión. "No queremos competir con el sector", ha puntualizado. Y en este sentido ha aclarado que gestionar no es hacer gestiones.
"El espacio soluciona problemas", ha considerado Cortés cuando ha entrado a explicar la organización de la Agencia, que cuenta con una novedosa Oficina del Espacio y Sociedad que hace proselitismo.
El responsable de la Agencia ha citado tres ambitos de actuación: nacional, europeo e internacional. En el primero ha destacado el PERTE aeroespacial de 2.800 millones de euros. "Estamos en un momento dulce que debemos capitalizar", ha avisado. En Europa, Cortés ha insistido en que "nos falta mucho trabajo", "falta un planteamiento que maximalice los beneficios de lainversión". En este sentido ha apuntado a la "cierta simetria" de funciones entre la Agencia Espacial Europea (ESA) y la Agencia de la Unión Europa para el Programa Espacial (Euspa). "Hay que revisar el justo retorno", una de las políticas pilares de la ESA, ha dicho. "Europa necesita un planteamiento geopolítco diferente".
En el ámbito internacional, ha evidenciado las diferencias con EEUU y China no solo en presupuesto espacial sino en kilos de carga puestos en órbita. "Si no tomamos medidas, la brecha espacial se hará inmensa. Necesitamos un músculo financiero enorme", ha adelantado.
Otra preocupación de Cortés destilada en su discurso ha sido la saturación del espacio, con 14.000 satélites entre activos e inertes.
Finalmente, el responsable de la AEE enumeró alguno de los aspects que integrarán la futura estrategia nacional espacial: la promoción del espacio como servicio; subir en cadena de valor aumentando el liderazgo en proyectos e instrumentos; apoyar a los microlanzadores; exploración (con dos astronautas españoles certificados por la ESA); misiones tripuladas; exploración de la Luna; fomentar "misiones pequeñas" de 100 millones de euros como Proba-3 o Arrakhis; la Constelación Atlántica; las comunicaciones cuánticas tanto GEO como LEO; las comunicaciones seguras y ópticas; la ciberseguridad; la defensa planetaria (contra asteroides); la meteorología; la sostenibilidad, por ejemplo con la misión Draco; la minería espacial; la construcción en órbita; el emprendimiento y los incubadores de empresas; los programas nacionales tractores.