La sonda Parker de la NASA rompe el récord de cercanía con el Sol

La sonda Parker Solar Probe de la NASA ha batido el pasado martes 24 un récord al convertirse en la nave espacial más cercana al Sol. La sonda —lanzada en 2018— está a 6,1 millones de kilometros de la superficie de la estrella, en el interior de la corona solar. Debido a la proximidad con el Sol, el equipo no tiene contacto con la nave espacial.  La NASA espera que empiece a enviar los primeros datos científicos de su acercamiento a finales de enero de 2025.

La sonda Parker se enmarca dentro de la misión "tocar" el Sol de la NASA. Según la agencia espacial estadounidense, esta operación "ayudará a los científicos a comprender mejor el impacto del Sol en la Tierra". Además, añade que "los datos de Parker serán clave para comprender y, tal vez, pronosticar el clima espacial". Esto es fundamental porque "puede cambiar las órbitas de los satélites, acortar su vida útil o interferir con los dispositivos electrónicos de a bordo".

La sonda pasó por primera vez a través de la atmósfera solar en 2021. En esa ocasión investigó acerca de los límites de la corona, la atmósfera superior del Sol. Desde su lanzamiento en 2018, la Parker ha ido orbitando gradualmente cerca de la estrella, utilizando sobrevuelos de Venus para moverla gravitacionalmente a una órbita más estrecha. Esto la ha hecho batir varias veces su propio rércord de cercanía al Sol. Según explica la agencia, durante siete años "la nave espacial completará 24 órbitas alrededor del Sol".

Sobre la Parker Solar Probe

Para cumplir con su misión, la sonda de la NASA debe ser capaz de soportar temperaturas extremas. La propia Parker y sus instrumentos están protegidos del Sol por un escudo compuesto de carbono de 11,43 cm, que puede resistir temperaturas que alcanzan casi los 1.377 grados centígrados.

Además, la nave espacial está capacitada para moverse a una velocidad de 692.017 kilómetros por hora, convirtiéndola, según la agencia, en el objeto creado por el ser humano más rápido de la Historia.

Para realizar sus investigaciones, la Parker cuenta con cuatro instrumentos científicos: Fields, que mide los campos eléctricos y magnéticos alrededor de la nave espacial; el instrumento Wispr, que toma imágenes de estructuras como eyecciones de masa coronal para ayudar a vincular lo que está sucediendo en la estructura coronal; Sweap, que recopila datos; y con el conjunto de Iosis (electrones, protones e iones) que ayuda a comprender los ciclos de vida de las partículas.