Francia ha adjudicado a un grupo liderado por Thales Alenia Space un contrato para capturar e inspeccionar un pequeño satélite en una misión de demostración de brazo robótico prevista para finales de la década.
Con el apoyo de una financiación no revelada de la Agencia Espacial Francesa (CNES) y el banco de inversión estatal francés Bpifrance, la misión utilizaría un par de naves espaciales que se lanzarían antes de finales de 2028 como parte del programa Europeo de Servicios de Apoyo Orbital Robótico (Eross).
Eross, que ha recibido financiación de la Comisión Europea, tiene como objetivo probar capacidades de encuentro y servicio en órbita baja terrestre con un satélite cliente de un metro cúbico y un servidor aproximadamente tres veces más grande y provisto con un brazo robótico.
Algunas demostraciones de Eross, que incluyen inspección, control de actitud, reabastecimiento de combustible y ensamblaje/intercambio de cargas útiles, se realizarían después de que el brazo robótico agarre una parte del satélite cliente que no fue diseñada específicamente para un servicio en órbita.
A diferencia de Eross, la directora de proyectos de Thales Alenia Space, Stéphanie Behar-Lafenêtre, dijo que su misión se llevaría a cabo después de que el satélite cliente girara para representar un objetivo que ha perdido altitud y control de la órbita. La misión Diane, o Démonstration d'Inspection et Amarrage Novatrice Embarquée, también utilizaría la configuración "no preparada" del satélite cliente.
"En el contrato Diane, el administrador utiliza sus cámaras (tanto en la plataforma como en el brazo robótico) para realizar una inspección de cerca del satélite", dijo Behar-Lafenêtre entrevistado por correo electrónico por Space News.
“En condiciones operativas, el satélite servidor puede utilizarse, además de inspeccionar, para ralentizar el giro del satélite y moverlo hacia una ubicación más adecuada. Esto prefigura la eliminación activa de escombros. Los escombros son, en este caso, viejas naves espaciales”, explicó.
Behar-Lafenêtre indicó que el servidor Eross actualmente en desarrollo necesitaría una actualización de software para manejar un objetivo giratorio, que podría cargarse en Tierra o mientras la nave espacial está en órbita. “Es el objetivo de los primeros meses del proyecto tomar este tipo de decisiones”, afirmó.