Reino Unido lanzó el pasado lunes 9 de enero a las 23:16 (hora española) su primer cohete espacial Launcher One, de la compañía estadounidense Virgin Orbit, siendo su
El cohete también transportaba dos de cubesats Circe; un cubesat Dover construido por Open Cosmos; un ForgeStar-0, el primer satélite de Space Forge; un satélite IOD-3 Amber, el primero de una constelación de satélites de reconocimiento de dominio marítimo para la empresa británica Horizon Technologies; el cubesat Stork-6; y Aman, el primer cubesat para el gobierno de Omán.
El CEO de Virgin Orbit, Dan Hart, ha dicho que trabajarán "incansablemente para comprender la naturaleza del fallo, realizar correcciones y llegar a la órbita tan pronto como hayamos completado una investigación completa y garanticemos de la misión".
El director de vuelos espaciales comerciales de la Agencia Espacial del Reino Unido, Matt Archer, admitió que "si bien este resultado es decepcionante, lanzar una nave espacial siempre conlleva riesgos significativos".
La empresa, sin embargo, asegura que "aunque la misión no alcanzó su órbita final, al llegar al espacio y lograr numerosos logros significativos por primera vez, representa un importante paso adelante". De las cinco misiones del cohete Launcher One que transportaban cargas útiles para empresas privadas y agencias gubernamentales, esta es la primera que no logra llevarlas a su órbita objetivo -en este caso, una órbita heliocéntrica (SSO), a 555 km de la Tierra-.
Actualmente, apenas una decena de países poseen la capacidad de lanzar cohetes y ponerlo en órbita desde su territorio: Estados Unidos, Rusia, India, Corea del Norte, Corea del Sur, Japón, China, Irán y Guayana Francesa para la Agencia Espacial Europea (ESA).