La NASA ha finalizado la revisión de la preparación de vuelo de la misión Artemis I (compuesta por el lanzador SLS y la nave Orion) en el Centro Espacial Kennedy, en Florida. Tras este exhaustivo examen en profundidad, la agencia estadounidense ha asegurado que la misión está lista para el despegue el próximo lunes tal y como estaba previsto. La compañía Airbus ha dirigido en nombre de la Agencia Espacial Europea (ESA) las operaciones europeas en la misión que han consistido fundamentalmente en el desarrollo del Módulo de Servicio Europeo (ESM) de la nave Orion, un elemento clave con más de 20.000 piezas y componentes, desde equipos eléctricos hasta propulsores, paneles solares, tanques de propulsión, materiales de soporte vital y varios kilómetros de cables y mangueras.
El responsable de Space Systems en Airbus, Jean-Marc Nasr, ha declarado que "el lanzamiento de la nave Orion de la NASA con el Módulo de Servicio Europeo tiene una importancia histórica 50 años después de la última misión lunar tripulada y es otro paso importante hacia el regreso de los astronautas a la Luna". Artemis I será el preámbulo de la próxima misión tripulada a la Luna que, si todo va según lo previsto, se realizará con la futura Artemis III. "El programa avanza ahora y estamos preparados para afrontar los retos de un regreso a la superficie lunar en torno a 2025 junto con nuestros clientes ESA y NASA y nuestro socio industrial Lockheed Martin Space", ha añadido Nasr.
La nave espacial Orion. Foto: NASA
El ESM: propulsión, soporte vital y transporte de cargas
El ESM es un cilindro de unos cuatro metros de alto y ancho. Cuenta con un característico generador solar de cuatro palas (19 metros de diámetro cuando está desplegado), que genera suficiente energía para dos hogares. Las 8,6 toneladas de combustible del ESM alimentan el motor principal, ocho motores auxiliares y 24 propulsores más pequeños para el control de actitud.
En el momento del lanzamiento, el ESM pesa en total algo más de 13 toneladas. Además de servir como sistema de propulsión principal para la nave Orion, el ESM permitirá las maniobras orbitales y el control de actitud. Proporcionará a la tripulación elementos clave de soporte vital, como agua y oxígeno. Además, el módulo de servicio no presurizado podrá utilizarse para transportar cargas útiles adicionales. También regulará el control térmico mientras esté acoplado al módulo de la tripulación, un sistema que ha sido desarrollado en España. Estas características han llevado a que desde Airbus se denomine al ESM como el "corazón y los pulmones" de la Artemis.
Los ingenieros de Airbus durante el proceso de integración del ESM en Orion. Foto: Airbus
Para el primer aterrizaje en la Luna, la nave espacial Orion se acoplará a la futura Estación Lunar internacional (o Lunar Gateway internacional), una plataforma en órbita lunar que permitirá la exploración espacial sostenida y ampliará la presencia de la humanidad en el espacio.