La NASA y Boeing han probado, el pasado fin de semana, 27 de los 28 propulsores que tiene el Sistema de Control de Reacción (RCS) de la nave espacial Starliner, anclada desde hace 50 días en la Estación Espacial Internacional (ISS), después de sufrir problemas en vuelo, precisamente en el propulsor no probado y que se ha dado por inutilizable.
La actual misión de la Starliner, conocida como Crew Flight Test (CFT) debía durar solo 10 días tras su lanzamiento el día 5 de junio, pero problemas en los propulsores y fugas de helio ocurridas antes de su atraque en la ISS al día siguiente han propuesto ese plazo indefinidamente hasta que los ingenieros solucionan el problema.
Las misiones de prueba como la CFT se enfrentan normalmente a lo inesperado, y la Starliner, construida por Boeing, siempre ha estado preparada para abandonar la ISS en caso de emergencia.
Los dos astronautas de la NASA afectados, Butch Wilmore y Suni Williams, participaron en la resolución de los problemas orbitales presentados antes de que se les asignaran tareas de mantenimiento en la Estación.
La NASA también extendió el límite inicial de la CFT en el espacio a más de 45 días, diciendo que el rendimiento de la batería principal de la nave -que marca el límite temporal- estaba funcionando mejor de lo esperado en órbita. La misión ha sido oficialmente calificada para 90 días, es decir, hasta el 3 de septiembre, aunque aún no existe fecha de aterrizaje.
Comprender las causas fundamentales de los problemas con el propulsor y el helio en el RCS, que controla las maniobras en órbita, es importante para futuras misiones Starliner. Después de la CFT, la misión Starliner-1 con al menos tres astronautas pasará seis meses en la ISS no antes de 2025.
Starliner es una de las dos naves espaciales privadas estadounidenses que envían astronautas a la ISS, junto con la Crew Dragon de la empresa SpaceX. La Crew Dragon, que transporta tripulaciones desde mayo de 2020, se basa en el Dragon de carga de SpaceX que ha estado en el espacio repetidamente desde 2012.
La Starliner amarrada la ISS en esta imagen ampliada capturada por el satélite WorldView-3. Firma: Maxar