El Consejo de Ministros ha modificado el plan de contribución de España a la Agencia Espacial Europea (ESA) para el período 2020-2026, aumentando la inversión hasta 586,7 millones, lo que supone un incremento del 55,65%. El Gobierno ya aprobó el 26 de abril la elevación del techo de gasto hasta 260 millones de euros.
Según el Gobierno, este compromiso de gasto permitirá a España “el desarrollo de un importante tejido industrial, ganar competitividad y especialización tecnológica”. Y es que la ESA garantiza el retorno de estas contribuciones mediante contratos a las empresas de cada país. Por cada euro invertido en la agencia, las empresas españolas obtienen 2,1 euros en contratos.
En los últimos periodos, España ha invertido cantidades muy por debajo del resto de países líderes en el sector espacial y por debajo del peso económico relativo de España en la organización conforme a su PIB. “La presente propuesta implica un incremento para poder mantener y consolidar la participación estratégica de las empresas españolas en el sector espacial europeo”, ha explicado la portavoz del Gobierno, Isabel Celaá.
Los fondos aprobados se destinarán a la participación española en las actividades obligatorias y asociadas, así como los programas opcionales de la ESA. puesto que el reparto definitivo quedará fijado en las negociaciones de la Space19+, que se celebrará en Sevilla a finales de este mes.
Por otro lado, Isabel Celaá ha resaltado que "la industria española podría entrar así en nuevos programas como la exploración lunar y ser líderes en nuevas misiones científicas".
España participa en los programas de la ESA, de acuerdo con el plan a largo plazo fijado por la organización y comprometido por España en las Conferencias Ministeriales de Bruselas (1999), Edimburgo (2001), Berlín (2005), La Haya (2008), Nápoles (2012), Luxemburgo (2014) y Lucerna (2016).