La ESA ha presentado el Explorador del Viento Solar, la Magnetosfera y la Ionosfera, o Misión Smile (por sus siglas en inglés), una nueva misión espacial en fase de creación que estudiará la meteorología espacial y la interacción entre el viento solar y el entorno terrestre.
Si bien naves espaciales como Cluster, la misión Magnetospheric Multiscale (MMS), SOHO, Proba-2 , Stereo y el Observatorio de Dinámica Solar observan constantemente el Sol y su efecto sobre el medio ambiente de la Tierra, hasta el momento ninguna misión era capaz de ver la conexión completa entre el Sol y la Tierra. Smile es la primera misión de la ESA que observará la conexión completa entre el Sol y la Tierra, llenando un vacío esencial en nuestra comprensión del Sistema Solar
Según informa la propia agencia, la particularidad de Smile es que "tomará las primeras imágenes y vídeos en rayos X del viento solar chocando contra la burbuja magnética protectora de la Tierra, y sus imágenes ultravioletas complementarias proporcionarán la visión continua más larga jamás vista de las auroras boreales".
Smile abordará tres cuestiones fundamentales que siguen sin estar claras debido a la falta de datos disponibles: qué sucede cuando el viento solar se encuentra con el escudo magnético de la Tierra; qué causa los fallos magnéticos en el lado oscuro de la Tierra; y cómo podemos predecir con antelación las amenazas climáticas espaciales más peligrosas.
De esta manera, este Explorador mejorará la comprensión del clima espacial y las tormentas solares. La magnetosfera que rodea la Tierra es invisible a los ojos humanos, pero con sus cámaras de rayos ultravioleta y rayos X, Smile revelará este escudo que nos protege del Sol. Sus hallazgos ayudarán a proteger la tecnología espacial y las vidas de los humanos en órbita alrededor de la Tierra, así como la infraestructura en la superficie terrestre.
La órbita de Smile lo llevará hasta 121.000 km de la Tierra por encima del Polo Norte, casi un tercio del camino a la Luna como máximo, y lo suficientemente lejos de la Tierra como para permitir que obtenga imágenes del límite del campo magnético de la Tierra.
Esta misión es una colaboración entre la Agencia Espacial Europea (ESA) y la Academia China de las Ciencias (CAS). La ESA aporta el módulo de carga útil de la nave, que transporta tres de los cuatro instrumentos científicos, y el cohete Vega-C que lanzará Smile al espacio. Por su parte, la CAS brinda el módulo de plataforma que alberga el cuarto instrumento científico, así como los módulos de servicio y propulsión.
Smile fue seleccionada dentro de un grupo de 13 misiones potenciales. La misión entró en su fase de estudio a principios de 2016. Tras la adopción por parte del Comité del Programa Científico (SPC) de la ESA en marzo de 2019, la misión se encuentra actualmente en ejecución: un período de cuatro años de construcción, prueba e integración de la carga útil y la nave espacial.
Después de la misión conjunta Double Star de la ESA y la Administración Nacional del Espacio de China en la década de 1990, Smile marca la primera vez que la ESA y China han seleccionado, diseñado, implementado, lanzado y operado conjuntamente una misión espacial.